“La Peste se dirigía a Damasco y pasó velozmente junto a la tienda del jefe de una caravana en el desierto.
– ¿A dónde vas con tanta prisa? Le preguntó el jefe. – A Damasco. Pienso cobrarme un millar de vidas. De regreso de Damasco, la Peste pasó de nuevo junto a la caravana. Entonces le dijo el jefe: – ¡Ya sé que te has cobrado 50.000 vidas, no el millar que habías dicho! La Peste le respondió: – No. Yo sólo me he cobrado mil vidas. El resto se las ha llevado el Miedo.” Feliz lunes¡¡¡
0 Comentarios
Deja una respuesta. |
AutorÁngeles Prol Archivo
Junio 2017
Categorías |